10 acciones eco-responsables que adoptar cada día.

El cambio climático, la erosión de la biodiversidad, la acidificación de los océanos, si todos estos problemas ecológicos no pueden resolverse únicamente con acciones individuales, es importante recordar que los pequeños esfuerzos de cada persona contribuyen a mejorar el futuro de todos.

Ante la urgencia de tomar conciencia de los problemas medioambientales, el 68% de los franceses se considera dispuesto a cambiar su comportamiento para reducir su huella de carbono y adoptar un estilo de vida más saludable y menos contaminante.


Si te gusta la idea pero no sabes por dónde empezar, el equipo de tu marca zapatos eco-responsables Favorite ha elaborado una lista de 10 acciones simples y efectivas para incorporar a su vida diaria para ayudar a fortalecer un futuro más verde para este mundo.

1 - Reducir el consumo energético

El consumo de energía representa una parte importante Nuestra huella de carbono. Pero pequeños hábitos como apagar las luces y desenchufar los aparatos eléctricos cuando están en modo de espera ayudan a reducir tu factura de energía.

Optar por bombillas LED y electrodomésticos de bajo consumo también es una excelente iniciativa. Estas consumen menos energía y las bombillas LED tienen una vida útil más larga, lo que las convierte en una opción económica y respetuosa con el medio ambiente.

Además, la calefacción y el aire acondicionado se encuentran entre las mayores fuentes de consumo de energía en nuestros hogares. Para reducir su impacto sobre el medio ambiente, instalar un correcto aislamiento térmico ayudará a mantener la casa cálida en invierno y fresca en verano, lo que reducirá la necesidad de calefacción en invierno y de uso de aire acondicionado en verano. Menos consumo también significa menos carbono liberado a la atmósfera.

2 - Optimiza tu consumo de agua

El agua es un recurso precioso, que debe utilizarse con moderación, más aún ante la escasez de fuentes de agua dulce, en particular debido al calentamiento global y las olas de calor.

Evitar los baños, tomar duchas más cortas e instalar reductores de caudal en grifos y cabezales de ducha ayuda a ahorrar una cantidad significativa de agua. De la misma manera, no dejar correr el agua mientras lavamos los platos o nos cepillamos los dientes, lavar la ropa a baja temperatura y utilizar un programa eco en los ciclos del lavavajillas y la lavadora pueden marcar una gran diferencia en nuestro consumo de agua.

3 - Reduce el consumo de carne y productos animales.

El consumo de productos cárnicos representa una huella de carbono especialmente elevada, porque la cría de animales, en particular de ganado vacuno, a través de su alimentación, transporte y digestión, emite cantidades importantes de gases de efecto invernadero (CO2, metano).

Además, reducir el consumo de carne y productos animales como la leche, en favor de alternativas alimentarias vegetarianas o veganas unas cuantas veces por semana, es una excelente manera de reducir el impacto ambiental. Además, una dieta predominantemente vegetal y equilibrada tiene la ventaja de ser menos rica en grasas saturadas, lo que supone un beneficio importante para el cuidado de la salud.

4 - Consume productos orgánicos, de temporada y de cultivo local para una alimentación sostenible.

El consumo de alimentos locales disminuye impacto ambiental Debido al transporte y al consumo de alimentos de temporada, se reducen las necesidades de riego y las emisiones de los métodos de cultivo artificiales, como la necesidad de calentar o iluminar los invernaderos.

Por último, comer productos orgánicos reduce la contaminación de la tierra y de corriente de agua, consecuencias de la liberación de pesticidas y otros productos de tratamiento, nocivos para el planeta, la biodiversidad y la salud.

Para ello, unirse a una AMAP cerca de casa en lugar de hacer las compras en un supermercado es una forma comprometida y un enfoque concreto para apoyar a los agricultores locales y fomentar la producción de circuito corto.

5 - Utilizar transporte respetuoso con el medio ambiente y limitar el uso de vehículos motorizados.

Los vehículos con motor de combustión interna, en particular los automóviles, representan la principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero en el promedio de CO2 emitido por persona en Occidente. Para reducir estas emisiones y la contaminación que estos vehículos provocan (partículas finas, residuos metalúrgicos, residuos plásticos) es preferible favorecer el uso del transporte público, el tren, la bicicleta o incluso caminar, en lugar de utilizar el coche.

Cuando prescindir del coche no es una opción, compartir el coche o recurrir a... Un vehículo eléctrico ligero o un coche híbrido siguen siendo alternativas más ecológicas, con un menor impacto de carbono que el uso de vehículos que funcionan con combustibles fósiles (gasolina, diésel).

6 – Reduce tu huella digital.

Aunque a menudo se pasa por alto la huella digital, tiene sin embargo un impacto significativo en el medio ambiente.

Disipación del calor emitido por los mega servidores, sobreexplotación de minerales para la fabricación de objetos digitales, etc.

Hay muchas formas de reducir estas fuentes de contaminación, como por ejemplo limitar el consumo de streaming y preferir descargar o ver contenido en calidad reducida. Apagar los dispositivos electrónicos y desconectar los cargadores cuando no estén en uso también evita el consumo innecesario de energía.

Para navegar por Internet, elegir alternativas como Lilo, Youcare o incluso Ecosia y Ecogine (ambos funcionan con energía renovable) como motores de búsqueda permite financiar proyectos eco-responsables, como la plantación de árboles.

Vaciar tus discos duros, ordenar tus correos electrónicos y archivos almacenados durante mucho tiempo en las nubes te permite ahorrar espacio de almacenamiento y evitar sobrecargar tus servidores.

De manera similar, limpiar, mantener y reparar su equipo informático en caso de avería tiene el efecto de alargar la vida útil de sus dispositivos digitales y reducir la necesidad de sustituirlos.

Por último, resistir la tentación de comprar cada nueva versión de un producto que sale a la venta ayuda a reducir su huella de material y, si es necesaria una compra, reemplazar sus dispositivos con productos reacondicionados evita el consumo excesivo y la sobreproducción de material.

7 - Compra productos duraderos y de calidad.

Priorizar la compra de ropa que apoye la moda sostenible, adquirir objetos y muebles de segunda mano y avanzar hacia electrodomésticos de calidad y que duren más, ayuda a reducir los residuos y la necesidad de comprar nuevos.

Optar por Marcas éticas europeas o francés, Producido sin productos animales, como DIENTE y nuestro Cesta vegana eco-responsable en cuero vegano tiene base de uva, ayuda a apoyar un método de producción basado en la moda lenta. Esto también permite que se dé menos visibilidad a las marcas de moda convencionales, que tienen hábitos de producción similares a los de moda rápida, y todas las molestias ambientales que estos ocasionan.

Comprar productos cosméticos vegan, productos de limpieza con etiqueta ecológica, o fabricación productos de limpieza propios con ingredientes naturales como vinagre blanco, bicarbonato de sodio y jabón de Marsella, también es una excelente manera de reducir el impacto ambiental.

8 - Reducir el uso de plásticos de un solo uso y favorecer las compras a granel.

Las enormes cantidades de plásticos de un solo uso que se utilizan para envasar todo tipo de alimentos y objetos representan una importante amenaza para la salud y el medio ambiente. Reducir el consumo de bebidas en botellas de plástico, beber agua del grifo -aunque haya que filtrarla-, elegir botellas y utensilios de madera reutilizables, pajitas de metal o de bambú, permite reducir significativamente el consumo de plásticos de un solo uso.

Reutilizar bolsas de plástico o utilizar bolsas textiles reutilizables tiene el mismo impacto positivo en el medio ambiente y los ecosistemas frágiles.

Por último, comprar alimentos y productos para el hogar a granel es una solución eficaz para Reducir el daño ambiental causado por los plásticos.

9 - Reparar y reciclar en lugar de reemplazar y comprar nuevo.

Aunque remendar ropa, reparar aparatos electrónicos o dar una nueva vida a los muebles en lugar de deshacerse de ellos puede parecer obvio, en realidad son prácticas más bien marginales y el fenómeno del sobreconsumo, combinado con precios de venta muy bajos, no incentiva la adopción de estas acciones eco-responsables.

Sin embargo, estos tienen el mérito de ser no sólo ecológicos, sino también económicos y buenos para nuestro bolsillo. Es más, pueden ser a la vez entretenidos y educativos, impulsándonos a utilizar nuestras manos y nuestro cerebro.

Para los menos manuales entre nosotros, cada vez surgen más talleres comunitarios de reparación y reuniones de ayuda mutua, con el fin de apoyar la realización de estas tareas de mantenimiento y adquirir habilidades de reparación.

Así como es importante que las empresas produzcan de manera responsable, utilizando materiales reciclados y procesos innovadores como el upcycling, con el fin de reducir la explotación de materias primas vírgenes, es fundamental que nuestro consumo integre el reciclaje como principio. Reciclar cartón y papel, reciclar residuos plásticos, reciclar vidrio o incluso metal, está ahora al alcance de todos y es un compromiso tangible y efectivo para proteger la naturaleza.

Para facilitar estos pasos, informarse sobre las instrucciones de reciclaje en su municipio y conocer las estructuras establecidas a nivel local (como lugares donde se instalan contenedores de compostaje para reciclar residuos orgánicos) puede ser de gran ayuda para practicar mejor acciones ecológicas cotidianas.

10 - Sensibilizar y compartir buenas prácticas

Décima, pero probablemente no la menos importante, de las acciones eco-responsables a adoptar para proteger el planeta: concienciar a quienes nos rodean sobre los problemas medioambientales e informarles del impacto positivo de las acciones eco-virtuosas es fundamental.

Participar en iniciativas colectivas para promover el consumo sostenible y comunicar sobre el beneficio común de la eco-responsabilidad es sin duda la mejor manera de trabajar en la lucha por el clima. La protección de los biotopos y de las especies vivas.

¡Expertos emergentes en acciones eco-responsables!

Ahora estás listo para hacer de tu vida diaria un verdadero pequeño refugio de sobriedad y resiliencia :)

Gracias por leer esto artículo hasta el final, y enhorabuena por la suma de todas vuestras acciones e iniciativas eco-responsables. Personal o colectivo, cada pequeño gesto cuenta para garantizar un futuro más saludable y sostenible para el bien común de todos.

No dudes en descubrirlo, redescubrirlo y hablarlo a tu alrededor. Nuestras colecciones de zapatillas veganas recicladas y de Nuestros zapatos eco-responsables, para un consumo sostenible y más acorde con el respeto a la naturaleza.